martes, noviembre 13

Sueño

...con ese halo de luz me adentro alegremente en la tiniebla, paso al lado de sus habitantes. De golpe, una cara deshilachada me persigue, logra desconcertarme, trastabilleo.

Me salta a las manos.

Sin apenas pensarlo, la doblo sobre sí misma, la meto en un sombrero, y abofeteo a un par de querubines.