miércoles, junio 23

Y ya he completado la obra, que ni la cólera de Júpiter ni el fuego ni el hierro ni el voraz tiempo podrá destruir. Que cuando quiera aquel día, que no tiene ningún derecho a no ser sobre este cuerpo, ponga fin al transcurso de mi insegura vida: sin embargo, en la mejor parte de mí seré llevado eterno por encima de los elevados astros, y mi nombre será imborrable y, por donde se extiende el poderío romano sobre las domeñadas tierras, seré leído por la boca del pueblo, y a lo largo de todos los siglos, gracias a la fama, si algo de verdad tienen los vaticinios de los poetas, VIVIRÉ.

Ovidio, Metamorfosis, traducción de Consuelo Álvarez y Rosa Ma. Iglesias, Cátedra.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Ahora aquí también eres leido hermoso Ovidio Nasón vive eterno!