martes, diciembre 13

Redondillas

¿De dónde viene esta ausencia,
este vacío persistente,
del corazón y la mente
esta rara inapetencia?

¿Es de los astros confluencia
que solo el alma presiente?
¿De algún afán indigente
es la incierta consecuencia?

La duda tiene su urgencia
pues el estado, silente,
empieza a ser coincidente
con el de mala conciencia.

Además que la evidencia
me muestra un vicio incipiente:
la propensión consistente
de hallar dulce la sufrencia.

(Digo, a riesgo que la ciencia
me catalogue demente
o que alguno, gravemente,
me adscriba a la decadencia)

7 comentarios:

Lety Ricardez dijo...

Caray Doña Maria Luisa esas si son redondillas, no las que surgen mientras se lava uno la cabeza en el baño matinal, estas vienen de quebrarse la cabeza durante y varias noches.

Lo-que-serA dijo...

En realidad no muchas noches mi Lety, porque además esas dos son rimas relativamente sencillas. Abundan palabras terminadas en "ancia" y en "ente". De cualquier manera, agradezco el elogio. Beso.

Larha dijo...

Ni dementes ni decadentes vi por aquí.

Bonito, muy bonito.

Un beso.

Silencio dijo...

Ni decadente, ni demente, bueno si algo de demente.

El vacio solo chupa todo para dejar de serlo, demonios!!! el vacío es la cosa más en desacuerdo consigo misma, digo, la tendencia del vacio es dejar de serlo. chaz

Lo-que-serA dijo...

Muchas gracias, Sinmás. Un poquieto de ambas, pero sólo la dosis precisa. Beso, también.

¿Será la tendencia del vacío dejar de serlo? Pues entonces lo hace muy mal, porque no importa cuánto consuma, sigue vacío. Para dejar de ser vacío, tiene que dejar de ser. :S Sí, algo demente. ;D

Lety Ricardez dijo...

¿Por qué tan dura contigo?
acuérdate de mis versos "mal rimados y peor medidos" y sonrío cuando los digo.
Esta Carmen si que me obligó a callar allá en tu casa. Por eso vine a disculparme y si, tienes toda la razón callar es doloroso, pero necesario.
Besos navideños para ti mi amiga incomparable.

Lo-que-serA dijo...

No es dureza, querida. Me gusta hacer poesía rimada. Me gusta también tu forma de decir y de callar. Te mando un abrazo enfiestadísimo, Lety preciosa.