...me muero por creer que es posible...
Cerati
Su mantra es que no existas;
cuando se llena los ojos de ti
los oidos de ti
la boca de ti.
Que no existas cuando busca en vano el testimonio
de algún olor
de una textura.
Sus dedos teclean tu asencia ciegos
enfebrecidas pupilas te miran en una ventana y otra;
no hay puerta que comunique sus dimensiones.
No la encontrará:
tú lo sabes.
Le es imprescindible
que no existas.
6 comentarios:
Ay, Dios. Bonito bonito. Aunque malo malo. Qué feo es colgarse el saco :S
Pero el saco se quita, sólo es sentirlo. DoñaMaria Luisa ya grita y grita en serio, no le alcanzo a medir las dimensiones
Uno de los mejores poemas que has escrito.
¿Saco? ¿De qué saco habla, señor? Los fantasmas no usan saco. A lo sumo, sombrero. Pero no. A mí me es imprescindible que tú existas.
Yo tampoco conozco de dimensiones mi Lety, Por eso a veces me voy de boca.
Gracias, maestra. Deben ser los fantasmas.
Jaja, sí. El saco.
Quíteselo, quíteselo.
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