Silba una locomotora a lo lejos.
Parece ir cantando la historia de una especie en extinción:
¡Ahí viene el tren, niñas!
¡Contemos los vagones!
Ese es de carga, ese de pasajeros,
ahí va el correo...
Treinta y nueve... cuarenta...
Ese amarillo del final es el cabúz.
Silba a lo lejos
y a lo lejos se ve su cuerpo serpentino
traquetear
en la nostalgia.
3 comentarios:
¡lindo!
tren-nostalgia-paz
qué bien estás escribiendo. Bravo.
No deje de palablabrear, Andreas. No deje.
Si, paz; aunque la paz de la nostalgia suele tener su pizca de amargura. Besos, güera.
Gracias mil, maestra. Estoy recuperando recuerdos. Beso, querida.
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